En este caso, una mujer de 33 años, madre de dos hijos, sufrió lesiones incapacitantes cuando la conductora culpable perdió el control de su coche en la autopista, provocando un grave accidente de tráfico.
A pesar de que la compañía de seguros del demandado, CSAA, contrató a un médico consultor que testificó que la demandante tenía hallazgos objetivos mínimos de lesiones en el examen, GJEL Accident Attorneys convenció a CSAA de que la credibilidad de la demandante con respecto a sus síntomas, como se refleja consistentemente en su extenso expediente médico, confirmaba la realidad de sus graves lesiones. La demandante recuperó 100.000 dólares.