En este caso GJEL Accident Attorneys representó a una pareja de ancianos que sufrieron lesiones significativas como resultado de un accidente automovilístico en Oakland, California.
La pareja estaba siendo conducida a un centro de diálisis para recibir tratamiento semanal cuando se produjo el accidente de coche. GJEL pudo demostrar que el servicio de conductores demandado fue negligente en su investigación del historial de seguridad del conductor, y que éste no aseguró adecuadamente a sus pasajeros antes de conducir. El resultado del caso fue un pago de 235.000 dólares a nuestros clientes.